Una vivienda de madera, de precarias condiciones, ardió en llamas y los bomberos de Luque llegaron tras la alerta por parte de vecinos que pidieron ayuda a la central de alarmas 132. Creyeron que el único ocupante de la casa, un albañil, se encontraba adentro.
Sin embargo, el capitán Jorge Detez, de la Compañía de bomberos de Luque, sostuvo que tras inspeccionar el interior no se encontró a nadie, que la vivienda estaba prácticamente vacía y que nada pudo salvarse.
Dijo que al llegar al lugar encontraron la vivienda prácticamente toda quemada, por lo que procedieron a extinguir el fuego, remoción y control.
Alegó que el fuego se propagó rápidamente debido a los materiales altamente inflamables como la madera. Según sostuvo, teniendo en cuenta el piso de la casa, se presume que la vivienda no habría tenido más de 2 metros por 2 metros de dimensiones.
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