Stronista reclama al Estado más de un millón de dólares de indemnización

Bernardino Caballero Galeano, exdelegado de gobierno en la época de la dictatura stronista, presentó una demanda por indemnización de daños y perjuicios contra el Estado paraguayo, al que reclama 1.370.000 dólares americanos, en concepto de daño emergente, lucro cesante y daños morales.

La acción, presentada por el abogado Ramón Argüello Vera, está a cargo de la jueza en lo civil y comercial Carla Taboada.

Caballero, abogado, comisario general, estuvo como delegado de gobierno de Canindeyú, Amambay y Alto Paraná desde 1982 hasta 1989, cuando fue detenido tras el golpe que derrocó al tirano, que tuvo lugar los días 2 y 3 de febrero.

En su presentación, Caballero relata que estuvo privado de su libertad primeramente en la base Naval de Ciudad del Este, luego en el Cuartel General de la Aeronáutica Militar y también en el Cuartel Central de la Policía de la Capital, por más de 30 meses.

El día del golpe, Caballero había recibido a una comitiva integrada por el secretario privado de la presidencia, Mario Abdo Benítez, y de autoridades del Partido Colorado, entre ellos el entonces diputado y presidente de Seccionales Coloradas de la zona Juan Eudes Pereira, para la habilitación de varias seccionales en la zona de Alto Paraná.

A las 22:00 del 2 de febrero. una comitiva encabezada por el capitán de Navío Amado Rodríguez irrumpió en la vivienda donde todos se encontraban cenando y procedió a la aprehensión de todos.

Caballero describe el procedimiento como de inusitada violencia y afirma que sufrió golpes que le causaron lesiones en la columna, que incluso obligaron a realizar una cirugía posteriormente. Afirma que estuvo preso por casi un mes, lapso en que sufrió apremios físicos.

En su acción, la mención al padre del presidente Marito es bastante repetitiva. Resta saber si dicha mención ejercerá algún efecto en la Justicia.

Caballero estuvo preso y procesado por secuestro y privación ilegítima de la libertad, proceso en el cual se decretó su prisión el 3 de octubre de 1989. El 26 de julio de 1991 obtuvo su libertad por compurgamiento de pena y el 13 de setiembre del 2000, fue beneficiado con el sobreseimiento definitivo por extinción de la acción penal.

Intentamos contactar con el procurador Juan Rafael Caballero, pero no tuvimos retorno.