Imputan por el tráfico de influencias en caso Messer

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Osmar Legal, Liliana Alcaraz y Francisco Cabrera, fiscales que investigan el tráfico de influencias.
Osmar Legal, Liliana Alcaraz y Francisco Cabrera, fiscales que investigan el tráfico de influencias.Archivo, ABC Color

Allegados al exministro del Interior Juan Ernesto Villamayor fueron imputados ayer por tráfico de influencias por solicitar US$ 2 millones a los abogados del entonces prófugo Darío Messer, para garantizar la protección del ahora procesado en Brasil, en el caso del escándalo del Lava Jato.

Los agentes fiscales Liliana Alcaraz, Francisco Cabrera, Jorge Arce y Osmar Legal imputaron por el delito de tráfico de influencias a José Ramón Bogado Cardozo (47) –secretario privado de Villamayor en el ministerio del Interior–, a María Lorena de Barros Barreto (48) y Diego Di Stéfano Mónaco (58), por supuestamente haber solicitado entre el 23 de abril y el 4 de mayo de 2019 la suma de US$ 2.000.000 a los defensores de Darío Messer, abogados Leticia Bóveda y Rodrigo Galeano, a cambio de ejercer sus influencias ante los miembros del Poder Judicial y con el entonces ministro del Interior Juan Ernesto Villamayor.

La coima era para obtener y asegurar resultados favorables respecto a la tramitación de cualquier planteamiento que pudieran realizar los defensores en representación del entonces prófugo Messer ante las instancias judiciales, así como el ofrecimiento de garantías para su entrega y sometimiento ante la justicia paraguaya, refiere la imputación.

Agrega: “En tal sentido, la suma solicitada sería distribuida en US$ 1.000.000 para Juan E. Villamayor, ministro del Interior, y el otro US$ 1.000.000 para los miembros de la Corte Suprema de Justicia”.

El 23 de abril de 2019 se comunica De Barros Barreto con la abogada Bóveda, para hacerle el ofrecimiento a favor de Messer.

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El 29 de abril, De Barros Barreto realiza a los abogados el primer pedido de los US$ 2 millones, que contó con la participación de Di Stéfano, quien se presentó ante los abogados como el supuesto nexo o vínculo con la influencia suficiente ante los miembros de la Corte Suprema para obtener favores judiciales a cualquier planteamiento que sea realizado por Messer. De Barros también se comunicó telefónicamente con Messer a través del celular de la abogada Bóveda.

Di Stéfano, incluso, garantizó la obtención de un hábeas corpus favorable ante la Corte para evitar la extradición de Messer al Brasil. El 4 de mayo se realizó otra reunión en el Hotel La Factoría, donde se hospedaba De Barros. donde también estuvieron el comisario Nimio Cardozo y José Bogado, pero la Fiscalía no encontró el nexo suficiente en el delito para imputar al exministro del Interior ni a los otros dos citados.

La Fiscalía pidió medidas alternativas al juez penal de Garantías José Delmás.