En esa fecha, el misionero se dirigía hacia Asunción con el propósito de dialogar con un técnico sobre la factibilidad para la instalación de una emisora en el Chaco.
Actualmente en ese sitio se halla una capilla dedicada al Pa’i Puku, donde los seguidores se acercan para revitalizar la vida espiritual o solicitar la protección para sus familiares. En el inicio de la maratón anunciaron que el día lunes 21 de junio el obispo de la diócesis de Benjamín Aceval, monseñor Amancio Benítez Candia, conjuntamente con el clero y representantes de la Congregación Oblatos de María Inmaculada, celebrará a partir de las 9:00 una misa solemne en memoria del gran misionero del Chaco.
La maratón de oración será desarrollada cada día y en forma simultánea en diversos lugares, tanto en el Chaco como en Asunción y en otras zonas del país, donde los feligreses, en unidad con el Santo Padre, estarán rezando por el fin de la pandemia, según informaron.
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Tras el fallecimiento de monseñor Pedro Shaw arrancó el proceso de su beatificación, impulsada en el año 2000 por el padre Guillermo Steckling, actualmente obispo de Ciudad del Este y Alto Paraná.
En el 2011, según explicaron en la maratón, fue publicado el libro “Pai Puku: un misionero santo en el Chaco Paraguayo”, escrito por el doctor Michael Krischer a solicitud del P. Miguel Fritz (OMI). En el 2012 se inició el diálogo con monseñor Cándido Cárdenas, obispo de la Diócesis de Benjamín Aceval. En el año 2018, se inauguró el Centro Espiritual Pa’i Puku. En el 2019, el nuevo obispo de Benjamín Aceval, monseñor Amancio Benítez, tomó la decisión de dar apertura oficial del proceso de beatificación. Finalmente, el evento no pudo llevarse a cabo debido a la pandemia.
De acuerdo al relato de sus seguidores, monseñor Pedro Shaw, misionero incansable, andaba a caballo, en cachapé y a veces a pie, por áridos desiertos y por extensos bañados, atravesando ríos y riachos, pantanos plagados de toda clase de insectos, para cumplir con su labor pastoral en la Región Occidental.
