De la reunión que se desarrolló en el local Doña Remigia participaron el diputado Miguel Cuevas y los parlamentarios del Mercosur Jorge Baruja y Juan Bogado. En la ocasión, el actual intendente reelecto de Carapeguá, Luciano Cañete, puso un pasacalles en que se leía: “Luciano Cañete 2023″, manifestando su intención de ser candidato a gobernador de Paraguarí, pero en el mismo equipo político también aspira a dicho cargo el actual diputado Martín Samaniego.
Velázquez manifestó que iniciar a las cinco de la mañana una reunión política obedece a una meta que se propuso: que antes de las elecciones quiere visitar a la gente, al pueblo, a la dirigencia, por lo menos 3 ó 4 vueltas antes de las elecciones 2023.
En Paraguarí dijo que su compromiso es que el pueblo escuche, sienta y entienda cuáles son los motivos de haberse candidatado para la presidencia de la República. Señaló que no es que le guste tanto hacer esto, pero sabe que el Paraguay necesita del trabajo y “nosotros vamos a demostrar que tenemos las ganas y la intención de trabajar en beneficio del pueblo paraguayo”.
Aunque no debemos olvidar que el vicepresidente, muy lejos de velar por los “beneficios del pueblo paraguayo”, fue salpicado por el escándalo durante el episodio del “acta entreguista de Itaipú” en mayo del 2019.
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Pese a usar todos los recursos estatales durante su gira, lo que significa una gran erogación de dinero del pueblo, Velázquez se comprometió a que desde el poder va a servir única y exclusivamente al pueblo paraguayo, ”por eso quiero hacer ese pacto, esa alianza con la dirigencia del partido y con el pueblo colorado y el pueblo paraguayo”.
Señaló que “nosotros les vamos a acompañar a los empresarios, les vamos a ayudar para que generen fuentes de trabajo, para que generen riquezas, pero ellos no pueden manejar la presidencia de la República para que exclusivamente el poder sea a favor de ellos”.
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Por otro lado, lamentó que hoy se tenga una Junta de Gobierno “amordazada, secuestrada... No existe en estos momentos el Partido Colorado, hace años que ni siquiera se reúnen”. Sin embargo, anteriormente, cuando integraba el doctor Luis María Argaña y otros, establecía las líneas políticas para el gobierno, donde en ese lugar se discutían los grandes problemas nacionales. Hoy parece una sucursal de bancos y solamente se utiliza para la maquinaria electoral las veces que va a haber elecciones.
La Junta de Gobierno tenía que ser y siempre fue el paño de lágrimas de la dirigencia colorada en donde la gente se iba a solucionar los problemas de su distrito, de su compañía, de su barrio, pero hoy se encuentra secuestrada, dijo Velázquez.
Subrayó que ese es un motivo por el cual los colorados se tienen que levantar, ese es el motivo real por el cual “tenemos que recuperar al Partido Colorado de mano de personas que ni siquiera tienen el sentimiento de un colorado”.
Dijo que en el 2017 “nosotros hemos defendido esta bandera de redención social del coloradismo en contra de estas mismas personas que quieren llevar el poder solamente para cuidar sus intereses económicos”.
“El pueblo ya le dijo no y a este Gobierno le dijo sí. Y esa es la misma bandera de redención del coloradismo que estoy levantando en contra de la misma estructura económica que quiere someter al Partido Colorado y al pueblo, como si fuera que somos sus empleados. Eso no le vamos a permitir como colorados, vamos a volver a levantarnos como en el 2017 y llegaremos al Palacio de Gobierno”, aseguró el precandidato a la presidencia Velázquez.