El representante del Ministerio Público ordenó, a través del Oficio N° 11/2022, la detención preventiva de Osvaldo Caballero González, Fernando Javier Caballero Mairoza y Rafael Eduardo Caballero Mairoza, quienes una vez aprehendidos deberán quedar recluidos en la comisaría 1° de Salto del Guairá.
Lea más: Inadaptados muelen a golpes a policías tras intervenir en caso de polución sonora
Los citados son señalados como quienes habían propinado una brutal golpiza al oficial primero César González, el oficial ayudante Justo Cabañas, al suboficial inspector Ariel Acosta y al suboficial primero Sergio Ávalos, quienes fueron a constatar una denuncia por polución sonora en la casa de Fernando Caballero, ubicada en el barrio San José de General Francisco Caballero Álvarez.
El sábado último a las 22:00, los policías fueron llamados para intervenir en un caso de ruidos molestos a causa de música a alto volumen en un equipo de sonido, provenientes de la casa de una persona identificada como Osvaldo Caballero González (59 años).
En el sitio fueron recibidos por quien sería hijo del dueño de casa, Fernando Javier Caballero Mairoza (28), a quien los dos agentes que llegaron le explicaron que hubo varias denuncias relacionadas al alto volumen de la música en el lugar, por lo que debían bajarlo. La promesa de Caballero fue que lo haría, pero tal cosa no ocurrió.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Minutos más tarde, los intervinientes recibieron nuevamente otras llamadas telefónicas en las que se denunciaba el mismo hecho citado, por lo que tuvieron que regresar al lugar, donde ya fueron recibidos con agresiones verbales y con empujones. En ese momento solicitaron refuerzos y llegaron dos uniformados más, Acosta y González.
El relato da cuenta de que Fernando Caballero le despojó al policía Ariel Acosta de la plancheta en la que estaba sosteniendo el papel para redactar la denuncia. Cuando intentó recuperarla, los presentes comenzaron a agredir físicamente a los intervinientes con golpes de puño y puntapiés, amenazándolos de muerte.
Los policías, quienes fueron superados en número, retrocedieron. Sin embargo, fueron perseguidos por los agresores ínterin en que el oficial primero César González cayó al empedrado, donde fue nuevamente agredido con golpes en todas partes del cuerpo.
González fue auxiliado luego por sus camaradas. Se pidió apoyo a las comisarías aledañas, desde donde llegaron más policías para intervenir en la casa de Caballero.
Las víctimas fueron trasladadas inmediatamente al Hospital Regional de Salto del Guairá para su asistencia médica y después se comunicó lo ocurrido al fiscal Vicente Rodríguez, quien solicitó la aprehensión de los sospechosos.