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Si bien la intervención principal culminó hace una semana, ahora el proceso de cambio de cañerías lo realizan en las zonas de las veredas de los frentistas, que también sufren las consecuencias. La mayoría de los usuarios que residen en la zona dicen que por horas quedan sin el servicio de agua potable, incluso durante días, en el peor de los casos.
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El trabajo de reemplazo de las cañerías como consecuencia trae el derrame indiscriminado del líquido vital, que termina minado en el pavimento recién colocado.
Si bien el agua corre sobre la capa asfáltica, hay sectores donde queda estancada, y con el tiempo ingresa por debajo de la capa del grueso pavimento.
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Muchos conductores se quejan de esta situación porque dicen que el agua al permanecer sobre el asfalto crea un desprendimiento, y a la vez la rotura del camino.
Dicen que ya ocurrió que en ocasiones anteriores, cuando la comuna reparaba las calles, y con la intervención de la Essap, los trabajos hechos se ven afectados y destruidos.
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En ese sentido, consultamos al Ing. Carlos Ramírez, encargado de los trabajos que se realizan en la mencionada zona, y manifestó que la labor que actualmente realizan fue coordinado con el municipio.
Mencionó que “los trabajos están concluyendo, tenemos incluso trabajos en Asunción, y Lambaré donde debemos ir. Que el agua corra sobre el pavimento no afecta, sí las pérdidas que se dan por dentro, pero esto ya fue solucionado”, alegó.