Clausuran local comercial por estafa a turista brasileño

SALTOS DEL GUAIRÁ. La Inspectoría Comercial de la Municipalidad de esta ciudad clausuró temporalmente un negocio ubicado en pleno microcentro tras una denuncia de estafa presentada por un ciudadano brasileño. El mismo adquirió un aparato celular, pero le entregaron otro de menor valor, confirmaron los intervinientes.

Gustavo Rodi, inspector general de la Municipalidad lacrando un local comercial por denuncia de estafa a turista
Gustavo Rodi, inspector general de la Municipalidad lacrando un local comercial por denuncia de estafa a turista

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El lacrado del local comercial cuyo nombre de fantasía es “Miami Shop” fue realizado en la mañana de este jueves por funcionarios de la Inspectoría Comercial del municipio, a cargo del jefe de dicha dependencia, Gustavo Rodi. El local afectado pertenece a Shariful Islam Buiyham (hindú) y se encuentra sobre la Av. Paraguay casi Rodríguez de Francia, en pleno microcentro de Saltos del Guairá. La clausura en principio es por tres días y se expone además a una multa de 100 a 200 jornales mínimos (de G. 10 millones a G. 20 millones, aproximadamente).

La determinación fue adoptada por el Juzgado de Faltas municipales, a cargo del abogado Carlos Alberto Gómez, tras una denuncia presentada por un ciudadano brasileño que hace 8 días habría sido estafado en dicho local comercial, por un valor superior a los 400 dólares (G. 3 millones, aproximadamente). El mismo adquirió un celular de dicho negocio, pero cuando llegó a su domicilio se percató de que no era el aparato que le habían mostrado.

Tras darse cuenta del golpe regresó esta semana y recurrió al Consulado brasileño donde relató lo sucedido y pidió acompañamiento para tratar de recuperar su dinero. Finalmente, el mismo volvió a Miami Shop acompañado de los inspectores de la Municipalidad y la Asesora Jurídica del Consulado, Mirian Maidana.

Tras tires y aflojes, el comerciante reconoció el fraude contra el extranjero y devolvió íntegramente la suma de dinero cobrado, y tomó de vuelta el aparato celular. La comuna, por su parte, actuó contra el embaucador basado en la Ordenanza 018/21, de Protección al Consumidor, conocida como la ley antipirañitas.

La norma municipal, entre otras cosas, castiga el empleo de guías, vulgarmente conocidos como piratiñitas, que bajo engaño conducen a los turistas hasta ciertos locales donde son estafados, ya sea con sobrefacturaciones o entrega de mercaderías distintas a las ofertadas. Otro modus operandi es el cobro de montos superiores al valor real del producto comprado por medio de las tarjetas electrónicas.

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