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Patricia Ortega, tía de la menor fallecida, confirmó que la menor falleció en el camino de vuelta la Hospital Materno-Infantil de Capiatá, luego de que la trasladaran inútilmente al Instituto de Medicina Tropical (ex Lacimet) para supuestamente ser internada en terapia intensiva.
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“Al llegar allí (ex Lacimet), no había lugar (en terapia intensiva). Por el camino falleció porque no le asistieron”, afirmó Ortega, indicando que supuestamente la médica que remitió a la menor desde el Hospital de Capiatá llamó a consultar si tenían lugar para la niña y por eso la enviaron.
La mujer recordó que los padres de la menor la llevaron primeramente a un centro asistencial privado denominado Divina Providencia en Luque, donde el médico “le había aplicado un antibiótico y con eso tenía que mejorar”; sin embargo “empeoró y tuvieron que llevarle al Materno (de Capiatá)”.
Pese a que entró consciente y pudiendo hablar incluso con su padre, pero lejos de mejorar al ser asistida en el Hospital de Capiatá, “después ya se le veía muy mal, casi no podría respirar y le tuvieron que entubar”.
Afirmó que primero pensó que los médicos inventaron eso para excusarse por no poder asistir a la menor. “Ni sospechamos ni pensamos que pudieron haber sido esas cosas”, refirió Ortega, que recordó que la menor vivía con la madre en Areguá.
“Estaba en muy malas condiciones, según dice el fiscal. Es una cosa de no creer, porque una nena que está todo el día con la mamá... Es imposible de no saber, que no vea, que no se percate, es imposible, no sé ni cómo explicar”, dijo.