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El magistrado nunca ocultó su amistad con la exmodelo a quien en la redes sociales trata de “tía Zuny”. Es más, suele pasar parte de sus vacaciones en la casa de Castiñeira en Río de Janeiro, Brasil, tiempo durante el cual juntos van al carnaval, a la playa y comparten reuniones familiares.
Uno solo de estos hechos es motivo más que suficiente para que el juez Óscar Delgado se aparte de la causa donde está acusado el senador Víctor Bogado, quien es amigo de Zuni Castiñeira, con quien además tuvo vínculos laborales.
Cuando Víctor Bogado fue nombrado como titular de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), a mediados del año 2000, comenzaron a arreciar las denuncias que señalaban que el político “ayudaba” a sus amigos y correligionarios.
Entre quienes recibieron algún beneficio apareció la empresaria Zuni Castiñeira, quien consiguió una reglamentación a la medida en el tema de servicio de audiotexto. La disposición no permitía, por ejemplo, que las operadoras telefónicas ofrecieran el servicio.
De esta forma, el político y la exmodelo -actualmente empresaria de las comunicaciones- logró sacarle grandes beneficios económicos a la mano que le dio su correligionario. No sería raro que ese favor de antaño hoy pueda ser saldado, ya que el “sobrino” de Zuni tiene que decidir si el senador Víctor Bogado va o no a juicio oral y público junto a su “Niñera de oro” Gabriela Quintana y Miguel Ángel Pérez Núñez, por cobro indebido de honorarios.
El juez Óscar Delgado debe fijar fecha para que se realice la audiencia preliminar y tiene que decidir si el parlamentario va a juicio oral o si archiva el proceso. Sin embargo, su objetividad está en duda debido a la triangulación de amistad que existe entre su persona, la de Víctor Bogado y la empresaria Zuni Castiñeira, a quien el juez llama "tía".