El árbol, que tiene unos 20 metros de altura, cayó aproximadamente a las 11:40 de este sábado. El yuyero Miguel Ángel Rolón, quien estaba bajo la sombra, escuchó unos ruidos y por instinto corrió del sitio, reportó la corresponsal Desiré Cabrera.
Gracias a ello, Rolón se salvó, ya que el árbol cayó y destrozó todos sus elementos de trabajo. Afortunadamente, ningún peregrino cruzaba por el sitio en ese momento.
El oficial inspector Efrén Camacho, de la Policía Caminera, manifestó que si el árbol caía en horas de la tarde podría haber lesionado o incluso matado a peregrinos que todavía van a Caacupé.
Afortunadamente, la caída no dejó víctimas que lamentar ni lesionados, aunque el árbol ocasionó ciertos inconvenientes en el tránsito, por lo cual intervino la Policía Caminera.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
