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La Contraloría de Camilo Benítez y la fiscalía de Sanrra no ven nada. Pero sí hay interés para aterrizar en Ybytymí y otras administraciones no cartistas y para procesar a Esther Roa y ciudadanos que protestan contra la desesperante corrupción pública.
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Ayer la valiente justicia paraguaya condenó a tres años a Stiben Patrón y otros por la quema del Congreso. Esto ocurrió el 31 de marzo de 2017, día en que el cartismo con sus cómplices liberales llanistas, del Frente Guasu y de Unace atropellaron la Constitución para buscar la reelección mau del “Patrão” y del actual senador Fernando Lugo.
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¡Qué valiente decisión! Mientras tanto, los ex senadores cartistas Víctor Bogadete y “Peluquín” González Daher fueron condenados apenas por dos años. El primero por el caso del caso de la “niñera de oro” y el luqueño por tráfico de influencias.
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El argumento de la condena a Patrón es porque rompió una computadora con un termo de tereré. Demasiado pererî para tres años. Con ese criterio , ¿por qué no le dieron pena máxima a quienes se llevaron millones de dólares a sus bolsillos?
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Al gobernador Nº 2 en locución pero Nº 1 en denuncias ni le tocan. ¡Lamentable!
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Pobre angá el “carbón mojado”. Inventa cosas para opinar y mantenerse en el “candelero”. Por poco no sienta postura en un concurso de belleza.
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Cuentan los que saben que “Re-Necho” anda muy preocupado porque los números no le favorecen para nada. Es más, alguien le dijo que con la cantidad de funcionarios de la Comuna ya le alcanzaba para ganar. Pero ni ellos le aguantan.
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Hugo estuvo por el Capitolio, un sitio que es centro de poder mundial. Muchos políticos paraguayos le estarán envidiando, especialmente el que sabemos.
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Hoy los diputados pueden decretar por ley “la muerte civil” de los electores. De sancionarse la iniciativa, retrocederíamos hasta la triste época de la dictadura stronista. Lo peor es que hay legisladores ñembo “progresista” que apoyan la propuesta.