El videojuego paraguayo “Malavisión” asoma en los play station de Rusia y China

Cuando uno hace lo que ama, trabajar para cumplir los sueños es algo muy agradable y satisfactorio. Eduardo Benítez (19) encontró su labor soñada, pues es uno de los creadores de “Malavisión”, el primer videojuego local que se vende en diversos países.

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 ¿Te imaginás que tu hobby se convierta en un trabajo? Dedicar horas a aquella actividad que hace desaparecer el aburrimiento de los días y que tu emprendimiento sea fructífero son los componentes que hacen ideal una labor.

“Todo empezó en el año 2014; cuando navegaba por YouTube, descubrí un video llamado 'Malavisión: Ñepyrũ' que resultó ser un juego creado por Ismael Pozzo, codirector de Warani Studios (WS) y me dije ahí mismo que tenía que contactarlo y contarle mis ideas acerca de crear un videojuego de la Guerra del Chaco; desde ese momento, empezamos a trabajar”, narra Eduardo.

El joven se desempeña como director de marketing de Warani Studios. Recientemente, la compañía Sony Interactive Entertainment anunció su apoyo a uno de los proyectos del grupo de jóvenes que conforman WS y, de esta forma, “Malavisión: Ñepyrũ” se convierte en el primer videojuego paraguayo para Play Station 4. “Aún no puedo procesar todo lo que está pasando, de verdad es un logro gigantesco y no solo para nosotros; este emprendimiento es una nueva puerta a todos los artistas, representa una gran oportunidad de poder vivir con la convicción de hacer lo que a uno le gusta”, opina Eduardo.

“En verdad, no hay palabras para explicar lo que significa para nosotros este logro; tantas horas empleadas, noches sin dormir y críticas recibidas, al final, dieron sus frutos y nos permitieron ir adelante hacia un futuro maravilloso para todo el país”, confiesa el joven.

Según los recuentos de Warani Studios, “Malavisión: Ñepyrũ” logró casi 50.000 ventas en todo el mundo y tiene a Rusia, China y EE.UU. como sus principales jugadores. “Con el pasar del tiempo y con todas las mejoras que hicimos, el mundo vio el potencial que posee Paraguay y empezó a difundir masivamente el videojuego”, afirma Eduardo.

“Malavisión” toca aristas muy crudas de la realidad paraguaya como la corrupción, maltrato a la mujer, problemas mentales y discriminación; además, mantiene un ambiente de misterio. “Yo creo que este juego es muy atípico porque desde el primer momento que tomás el control uno sabe que está de lado del malo de la historia; cada paso que das es para ayudar al villano a salvarse”, comenta el joven.

Eduardo manifiesta que el proceso de desarrollo del videojuego fue arduo y bastante difícil. “Trabajamos más de dos años en todo esto, desde el 2016 hasta el día de hoy seguimos mejorando Malavisión y agregando más cosas, quitando algunas y solucionando otras”, afirma.

El joven piensa que el hecho de salir del estereotipo, ante la sociedad, ya es razón suficiente para ser criticado y más si es algo como los videojuegos. “Imaginate explicar a tus padres que vas a 'hacer jueguitos'. ¡Qué escándalo! Pero creo que es nuestra tarea explicar que esto nos hace felices y que deseamos hacerlo por toda nuestra vida”, finaliza Eduardo.

Por Belén Cuevas (16 años)

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