Comentario: Gobernar con los cortesanos. Por: Arturo Zarratea

Este artículo tiene 1 año de antigüedad
/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2394

En las antiguas cortes el rey ejercía su autoridad rodeado de nobles que intentaban acomodarse -ellos y sus familias- o mantener los privilegios que ya tenían por sobre la población. Ser un cortesano no solamente implicaba haber heredado la sangre azul, también requería de la destreza de saber ubicarse a pesar de cualquier situación desfavorable que lo podía enviar al destierro o la llanura.