Condenan a un policía y absuelven a otro por ataque a un niño y su familia

Un oficial fue condenado a cuatro años de cárcel y un suboficial absuelto de reproche y pena en el sonado caso de la persecución a tiros en la que resultó herido un niño de seis años, luego de que su padre eludiera una barrera anticoronavirus de la Policía Nacional, hace dos años en San Lorenzo.

Oficial ayudante Derlis Miguel Sanabria Talavera, condenado, a cuatro años. Suboficial inspector Juan Darío Amarilla Ramírez, absuelto.
Oficial ayudante Derlis Miguel Sanabria Talavera, condenado, a cuatro años. Suboficial inspector Juan Darío Amarilla Ramírez, absuelto.

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Un policía fue condenado y otro absuelto en un caso de “gatillo fácil” que se dio en 2020, en San Lorenzo. El policía condenado es el oficial ayudante Derlis Miguel Sanabria Talavera, de 27 años de edad, en tanto que el absuelto y ahora ya liberado es el suboficial inspector Juan Darío Amarilla Ramírez, de 40 años.

Ambos eran personales de la Comisaría 1ª Central de San Lorenzo hasta el 30 de mayo de 2020, cuando a las 20:29 iniciaron una persecución contra un automóvil Toyota Runx, negro, que a su vez detuvo la marcha, hizo un giro en U y regresó hacia la ciudad de Luque para evitar un retén policial instalado sobre la avenida General Eugenio A. Garay (ruta Luque – San Lorenzo), 400 metros antes de la rotonda Yberá.

En esa época, estaba vigente la cuarentena sanitaria por la pandemia del coronavirus y había restricciones en la circulación.

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El suboficial Amarilla manejaba el móvil policial, que era un automóvil, y el oficial Sanabria iba al lado, como jefe de grupo.

Policías siguieron al vehículo en el que iba toda una familia

En el vehículo perseguido estaba toda una familia, conformada por el papá, la mamá, el hijo de seis años y una beba de tres meses.

La familia fue perseguida a tiros durante seis kilómetros por la ruta Luque - San Lorenzo, hasta que el papá entró a la calla La Paz de Luque, donde finalmente tuvo que parar la marcha al ver herido a su hijo en el asiento de atrás.

Cuando los agentes llegaron junto al coche acribillado, a toda costa trataron de esposar al papá, quien suplicaba que auxiliaran a su hijo. Finalmente, una mujer que pasaba con su vehículo llevó a la criatura a un hospital.

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El menor de edad estuvo internado en el Hospital de Trauma, donde le salvaron la vida, y finalmente salió de alta el 12 de junio de ese mismo año.

El juicio oral

Desde que sucedió el hecho, hace más de dos años, los dos policías sospechosos de “gatillo fácil” permanecieron recluidos en la Agrupación Especializada.

La fiscala de la causa, Ana Girala, había acusado a ambos por tentativa de homicidio, lesión corporal en el ejercicio de funciones públicas y omisión de auxilio.

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El proceso finalmente concluyó ayer jueves, cuando se dio a conocer el fallo del Tribunal de Sentencia, en el último día del juicio oral, que se hizo en el Palacio de Justicia de Luque, el Tribunal de Sentencia que estuvo presidido por Fátima Soledad Rojas e integrado por Gladys Carolina Bernal y Julio César López.

Los magistrados declararon culpable al oficial ayudante Derlis Miguel Sanabria Talavera solo por el hecho de lesión corporal en el ejercicio de funciones públicas y lo condenaron a cuatro años de reclusión, ya que este fue el que disparó contra el auto de la familia. Sanabria seguirá encerrado en la Agrupación.

Mientras que el suboficial inspector Juan Darío Amarilla Ramírez fue absuelto de reproche y pena y salió en libertad inmediatamente después.

Fiscalía apelará fallo

La fiscala Girala, quien pidió ocho años para el oficial Sanabria y seis años para el suboficial Amarilla, anunció que va a apelar el fallo en primera instancia.

Según los datos, la familia afectada habría llegado a un arreglo económico con la Policía Nacional, lo que pudo haber incidido en el fallo de los jueces.

De hecho, en la última jornada de la diligencia, el papá del niño baleado se abrazó y lloró con los policías enjuiciados.

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