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El niño de cinco años falleció por el disparo accidental de un rifle calibre 22, aparentemente manipulado por su hermanito de tan solo ocho años, en la tarde del sábado a las 15:30 mientras estaban solos en su vivienda.
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El pequeño fue auxiliado por un vecino que escuchó el estruendo y se acercó hasta el lugar y llevó al pequeño hasta el Hospital Distrital de Natalio, donde se confirmó su deceso.
El trágico suceso ocurrió en el barrio San Marcos, sexta línea de la compañía Natalio Km 6, en el distrito de mismo nombre ubicado al noreste del departamento de Itapúa.
Los padres de los niños alegaron que fueron a realizar compras en el centro de la comunidad, a cuatro kilómetros del lugar, mientras ocurrió la tragedia.
Investigarán las responsabilidades
El fiscal de la causa, Walter Castro, afirmó que investigarán la responsabilidad de los mismos porque si bien se presenta una clara falta al deber del cuidado, la justicia considera que existe una pena natural para los mismos.
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No obstante, refiere que ahondarán en las investigaciones para determinar a quién corresponde el arma y si se adecua a los requerimientos de la ley de armas. También solicitarán a las instituciones responsables que brinden el apoyo psicológico al otro menor involucrado, para superar las secuelas de este trauma.
La familia se encontraba al cuidado de la vivienda donde ocurrió el accidente. La madre declaró que el rifle se guardaba arriba de un armario, pero que en esta ocasión después de limpiar el lugar, se olvidó de volver a guardar el arma, dejándola al alcance de los pequeños.