Concejal aliado al clan Arévalo, amarrado por tendal de deudas

Jimmy” Paniagua (d) es aliado de Orlando Arévalo (1º izq.) y su esposa Carolina Arévalo (Archivo).
Jimmy” Paniagua (d) es aliado de Orlando Arévalo (1º izq.) y su esposa Carolina Arévalo (Archivo).Gentileza

El concejal colorado cartista de Lambaré Elvis Daniel “Jimmy” Paniagua, aliado del exdiputado cartista Orlando Arévalo y su esposa, la concejala lambareña y precandidata a la intendencia, Carolina González, está apretado por un tendal de demandas de cobros hasta por pensión alimentaria, mientras la fortuna sospechosa del clan Arévalo sigue sin ser investigada por Fiscalía.

Hasta ahora mantiene la bendición del cartismo, lo que explicaría la “lealtad” de Paniagua.

Entre los varios procesos de cobro que soporta “Jimmy” Paniagua, hijo del exdiputado –ahora cartista– Ángel Paniagua, uno de los leales del clan Arévalo, hasta tuvo que disponerse en agosto pasado el descuento compulsivo de G. 1.500.000 de su salario para cumplir con la pensión alimentaria.

Este apenas es uno de los tantos reclamos de cobro de deuda en su contra, ya que la empresa Credisolución Saeca también tuvo que iniciar una demanda para cobrarle G. 33.876.000 al concejal.

Igualmente, hizo lo propio Financiera Paraguayo Japonesa Saeca, que requiere al concejal la suma G. 13.757.339, además solicitó el embargo de su salario en la municipalidad lambareña. Otra deuda sideral judicializada fue promovida por Miguel Mendiguren, quien reclama vía demanda a Jimmy Paniagua la suma de G. 104.000.000.

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Finalmente, también en carácter particular, Jorge Nemesio Giménez le reclama una deuda de G. 4.200.000, en un proceso judicial aún en curso.

En total, en procesos judicializados el concejal es requerido por un total de G. 157.333.339.

Paniagua es uno de los leales al clan que, pese a la cantidad de denuncias penales en su contra, sigue sin ser imputado y mantiene gran poder económico y político en Lambaré.

Si bien Arévalo se vio forzado a renunciar a su banca en Diputados, tras el caso de las conversaciones con el difunto diputado cartista Eulalio “Lalo” Gomes, donde se evidenció que manejaban jueces y fiscales a través del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), este sigue formando parte del cartismo.