20 de diciembre de 2025

«Piensa todos los días en la muerte –decía Rafael Barrett– y tu obra resplandecerá de vida». Y la escritora Ana Vega, en El Cuaderno Griego, habla del dolor, del silencio, del «no muerto», ese cadáver vivo que respira en la oscuridad, oxidándose hasta perderse para al final encontrarse a sí mismo, para descubrir su propio yo, su propio camino. Ana Vega conoce la noche que nos habita, reflexiona sobre el mundo de forma tan íntima que nos identificamos con sus pensamientos. Ha vuelto de la soledad para contarnos que a veces es necesario «volver al dolor. Lo conocido». Ana Vega nos confiesa cómo es la oscuridad, cómo es sentirse solo, cómo «sobrevivirnos».