El juez Humberto Otazú declaró en rebeldía y ordenó la captura del exsíndico de Quiebras, Blas Manuel Velázquez Fernández, imputado el 31 de julio pasado por lesión de confianza y otros hechos punibles más. Esto ante las incesantes chicanas que presentó, a través de sus abogados, desde la clandestinidad. Este habría intervenido en la doble venta de un inmueble.
El síndico de Quiebras, Blas Velázquez, cedió dos veces por escritura pública un mismo crédito hipotecario del desaparecido Banco Unión, según revelan documentos en poder de ABC. El protegido del ministro y presidente de la Corte con permiso, Antonio Fretes, primero negoció derechos y acciones de la quebrada entidad por G. 20 millones. Siete meses después, Velázquez realiza la misma operación, pero ya por G. 100 millones y con otra persona.
Representantes de una empresa denuncian el supuesto despojo de un inmueble ubicado en San Bernardino y apuntan al síndico de Quiebras, Blas Velázquez, vinculado al presidente, con permiso, de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Antonio Fretes. El predio fue vendido en 10 veces menos de su valor real de mercado.
La rosca encabezada por el síndico Blas Velázquez y la abogada Ana Mora es ligada a un nuevo caso de despojo. El propietario de una empresa de transporte denunció que hace ya casi una década que no lo dejan ingresar al predio de su firma. La red cuenta con la protección del ministro de la Corte Antonio Fretes.
Una mina de oro en Paso Yobái, cientos de lotes en San Bernardino y una empresa de transporte en Quiindy. El esquema encabezado por el síndico de quiebras Blas Velázquez tiene un largo historial de presuntos despojos y denuncias por estafa. El funcionario judicial es compueblano de Antonio Fretes, el presidente con permiso de la Corte Suprema de Justicia. En su Quiindy natal, ambos han levantado un pequeño imperio de propiedades, relatan.