06 de diciembre de 2002 - 09:12
El desarrollo de la iluminación artificial
Este artículo tiene 23 años de antigüedad Desde que el hombre aprendió a manejar el fuego, encontró una de sus más útiles aplicaciones: el hecho de prolongar las horas de luz más allá del ocultamiento del sol. Se inventaron numerosos artefactos para iluminar las estancias, por ejemplo, Leonardo de Vinci ideó una complicada lámpara que le permitía trabajar de noche sin deteriorar sus vista.