Rechazan estudio que vincula maíz transgénico a cáncer

Este artículo tiene 13 años de antigüedad
/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2395

PARÍS. Una comisión científica francesa rechazó el lunes un polémico estudio realizado por investigadores franceses que aseguraba que las ratas alimentadas con maíz transgénico sufren cáncer y mueren antes.

Pidió que se efectúe un estudio “independiente”.

El Alto Consejo de Biotecnología (ACB) afirmó que no halló “una relación de causa” entre los tumores de las ratas y el consumo de un maíz transgénico, como aseguraban en su estudio los investigadores de la Universidad de Caen.

Los métodos utilizados en el estudio, que concluyó que las ratas alimentadas con un maíz transgénico producido por el gigante estadounidense de agroquímica Monsanto sufren tumores cancerígenos y mueren antes, son “inadecuados”, determinó el ACB, que realizó su investigación a pedido del gobierno francés.

El estudio publicado en septiembre por el equipo del profesor de biología molecular de la Universidad francesa de Caen, Gilles-Eric Séralini, reactivó la polémica sobre los riesgos para la salud de estos organismos genéticamente modificados.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

Los científicos analizaron durante dos años los efectos en doscientas ratas del maíz transgénico NK603 y del herbicida Roundup, el más utilizado en el mundo -los dos producidos por Monsanto- desencadenó una tormenta en los medios gubernamentales, científicos y de defensores del medio ambiente.

El ACB recomendó que se realice un “estudio a largo plazo, independiente y transparente”, bajo los auspicios de los poderes públicos, sobre la seguridad sanitaria del maíz transgénico NK603.

Esa investigación debe tomar en cuenta “visiones contradictorias”, para poder “responder a las interrogantes de la sociedad” sobre la toxicidad o inocuidad del maíz transgénico, resaltó el Comité económico, ético y social del ACB.

Las conclusiones del estudio de los científicos de la Universidad de Caen, de que en las ratas alimentadas con transgénicos aparecen tumores hasta 600 días antes que en las ratas indicador (no alimentadas con transgénicos), mientras que en el caso de las hembras aparecen una media de 94 días antes, advertían sobre los riesgos para los seres humanos de los alimentos modificados genéticamente.

Tras la publicación de esa investigación, Francia “pidió un procedimiento rápido, del orden de algunas semanas, que permitirá verificar la validez científica de ese estudio”, y anunció que si se confirmaba que los transgénicos agrícolas son peligrosos para la salud, pediría su prohibición a nivel europeo.

Francia presentó además el tema ante la Agencia de Seguridad Sanitaria, y la Comisión Europea pidió a su agencia responsable de la seguridad de los alimentos que examinara los resultados del estudio para “sacar conclusiones".

El estudio de los investigadores franceses, publicado en una revista científica, dio lugar a numerosos llamados pidiendo la suspensión de la autorización de cultivo de estos productos.

Al anunciar este lunes los resultados invalidando el estudio de los investigadores de la Universidad de Caen, el ACB resaltó que la nueva investigación independiente debe ofrecer respuestas a las interrogantes de la sociedad sobre los OGM.

La meta del nuevo estudio “es tranquilizar a la opinión pública, que ya no sabe que creer”, dijo a la prensa Christine Noiville, presidenta del el Comité económico, ético y social del ACB.