“En el kilómetro 75 tuvimos un percance en una de las zanjas. Había una zona con zanjas que no estaba indicada en el 'road book' . Caímos en una zanja y al aterrizar dañamos el coche”, comentó el doble campeón mundial asturiano de Fórmula Uno, que este año ganó el Mundial de Resistencia (WEC).

“Paramos para reparar y vimos que estaba otro de nuestros compañeros parado, (el holandés) Ten Brinke. Le sucedió lo mismo a varios coches. El que venía detrás dio varias vueltas de campaña”, manifestó Alonso, en declaraciones difundidas este lunes por su escudería.

“Rápidamente nos pusimos a cerrar esa zona para que los otros coches pasasen por otro sitio diferente. Crucemos los dedos para que el coche esté reparado para mañana y si es así estaremos listos para sumar más kilómetros”, explicó, tras la tercera etapa de la prueba marroquí, Alonso, que finalmente sí podrá salir este martes.