"Me siento bien. Obviamente ahora duele un poco, pero como ganamos, me siento bien. Habrá que esperar como sigue el dolor en las próximas horas. Fue un calambre”, dijo en la rueda de prensa posterior en la que participó EFE.
Doncic ponderó a su compañero Spencer Dinwiddie, llegado en el traspaso por el que se marchó Kristaps Porziņģis el último día de mercado y que fue el autor del triple ganador contra los Celtics.
“Él se quedó abierto después de que yo entrara con el balón, era el mejor tiro que podíamos tener; claro que confío en él y pudimos ganar el partido gracias a eso. Nos hace un mucho mejor equipo. Es un gran jugador con balón”, comentó.
Éste le devolvió el halago al ser cuestionado por las palabras de Doncic en sala de prensa. "Me inspira mucha confianza”.
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El esloveno fue protagonista también con su última defensa. Punteó un triple de Marcus Smart y los árbitros señalaron falta al ver el contacto de Doncic con la mano derecha del escolta de los Celtics, pero tras la revisión los colegiados decretaron que no se produzco infracción, algo de lo que Luka estaba muy seguro.
“Lo sabía porque la regla dice que si el tirador deja la mano para buscar el contacto, no es falta”, recordó a la vez que hacía el gesto de echar la mano hacia adelante.
Doncic ensalzó la victoria de su equipo en un ambiente y una cancha complicadas: “Es un partido de ‘playoffs’, seguro. Jugar aquí es muy difícil y la gente hace mucho ruido, más hoy porque después le van a retirar la camiseta a Garnett. Es como van a ser los playoffs y así podemos aprender”, concluyó.