Desgaste físico de Luqueño, clave en el trámite
Olimpia no tuvo problemas anoche en Sajonia para vencer a Sportivo Luqueño. El Decano, que se estrenó con Bustos en la banca, aprovechó el notable desgaste físico del Auriazul para llevarse los tres puntos.
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El ritmo acelerado que impregnó el Expreso en los primeros minutos era insostenible para Luqueño, que estaba seriamente afectado en lo físico que incluso empeoró con la salida de Pablo Aguilar, que evidenciaba el desgaste de la doble competencia.
La novedad en la disposición táctica de Bustos fue la inclusión de Leguizamón por el sector derecho para poder aprovechar su velocidad con el perfil cambiado, esta maniobra no tardó en surtir efecto, cuando se gestó el primer gol.
Iván se proyecta por derecha y mete un pase a Derlis, este trata de meter un centro, pero es desviado por Marchio para que del rebote le pegue al arco Domínguez y el trascurso Benedetto con golpe de taco casi lograr marcar ante la intervención de Espínola, que cedío el rebote para que aproveche Tobías Morínigo para definir ante el descuido defensivo.
Luqueño se repuso y salió a buscar la igualdad, que llegó producto de un error de Beto Espínola, que cedió un lateral de ahí el pase fue para Rodrígo Cáceres, quien no dudó y sacó un remate impecable desde fuera del área para clavar el balón al ángulo de Verza y establecer la paridad.
Algo que no duró mucho ya que antes de finalizar el primer tiempo el Franjeado volvió a golpear, centro de Beto, aparición de Leguizamón para el 2-1.
En la segunda mitad, una mala salida del auriazul gestó el contragolpe de Olimpia, que lo tomó Leguizamón para sacar un remate de afuera del área para anotar el tercero y así sentenciar el cotejo.
