Abelardo desveló que el presidente ejecutivo, David Guerra, y el director deportivo, Gerardo García, le habían enseñado el proyecto elaborado por el grupo Orlegi y comentó que "es una pasada, un proyecto que ilusiona de verdad", por lo que dijo que "ojalá se pueda cumplir".
El técnico rojiblanco afronta el partido ante el filial del Villarreal B con bajas sensibles en el centro del campo, en el que no pueden estar Gragera, Pedro Díaz y Nacho Méndez, pero en el que recupera a Christian Rivera que, según Abelardo, "ha entrenado toda la semana y puede competir".
Rivera apenas ha disputado minutos, ya que ha enlazado varias lesiones consecutivas, pero esta semana se ejercitó con normalidad con el resto del equipo y puede ser una de las novedades en el equipo inicial, ya que Abelardo no tiene muchas más opciones donde elegir.
Una de ellas es el jugador del filial Nacho Martín, que, según Abelardo, "no viene para rellenar" y "si tiene que jugar lo va a hacer bien".
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El técnico recordó al respecto que tiene tres centrocampistas -el propio Martín, Rivera y Zarfino- y "dos de ellos saldrán de inicio".
Abelardo fue crítico con su equipo tras el partido de Tenerife, sobre todo por la falta de intensidad en la segunda parte, lo que le costó el empate en un partido en el que el Sporting se había adelantado en la primera.
"En Tenerife no me gustó el equipo y como nos echamos atrás me enfadé con los jugadores, pero es mi forma de ser; expresé esas sensaciones y espero que la situación no se vuelta a repetir", manifestó Abelardo, que sí se mostró satisfecho de la intensidad del trabajo en los entrenamientos.
Sobre el filial del Villarreal, Abelardo destacó que "es muy vertical y con mucha calidad y muy intenso, algo raro para ser un filial", si bien también señaló que "está encajando bastantes goles, pero es un equipo muy peligroso porque tiene futbolistas que acabarán jugando en primera división".
