"Era una gran oportunidad, pero no hay margen. Mañana a entrenar, el lunes a jugar en Mallorca y el jueves contra el Betis. Nosotros solemos reaccionar bien en estas situaciones", señaló Valverde, tras admitir que el partido tuvo un "final sorprendente" con ese penalti de Yeray sobre Ocampos que transformó el argentino en el minuto 91.
"Este es un juego en el que no hay que cometer errores. Nosotros cometimos uno importante que nos ha costado el partido", reconoció el 'Txingurri', quien no cree que fuera exclusivamente una jugada de "mala suerte".
"De lo que se trata es de provocar que la mala suerte la tenga el contrario. La presión la ha hecho el jugador del Sevilla y si te aprieta es porque piensa que puede pasar algo. Hay una parte de fatalidad y otra que no es fatalidad y que es la que tenemos que revisar", reflexionó.
Acerca del encuentro, Valverde destacó que en el primer tiempo el Athletic estuvo "bien" y "transmitiendo peligro", pero en el segundo el Sevilla estuvo "más asentado" y sus futbolistas "acusando el cansancio". "El partido iba hacia el cero a cero porque nosotros no éramos capaces de crear peligro ni ellos tampoco", señaló.
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