Draper, un especialista en aferrarse a los partidos y apurar sus recursos en la pista, repitió ante Lehecka, verdugo del español Carlos Alcaraz, la misma estrategia que empleó contra Berrettini y sumó su novena victoria seguida en un torneo de categoría 500 después del de Viena que ganó en octubre de 2024 y que unió al de Sttutgart, los dos únicos trofeos que hasta ahora brillan en su palmarés.
En dos horas y veinticuatro minutos, el británico culminó su mejoría ante Lehecka, al que ganó por segunda vez en los tres enfrentamientos que han protagonizado. Los otros dos fueron en 2024. En Adelaida, que ganó el checo, y en el Masters 1.000 de París, que consiguió el británico.
Draper demostró en Doha, donde ha alcanzado la quinta final de su carrera, estar ya restablecido de los contratiempos físicos que le obligaron a retirarse del Abierto de Australia, en el partido ante Alcaraz, por una tendinitis de cadera. Es el tercer británico en alcanzar la final de Doha tras Andy Murray y Tim Henman
No le afectó la pérdida del primer set a Draper. Lehecka, tal y como hizo con Alcaraz, arrancó fuerte y aprovechó la rotura en el octavo juego para cerrar el parcial y tomar ventaja en el partido. El británico, de hecho, subió su nivel en el segundo y por primera vez pudo amenazar el hasta entonces sólido servicio del checo.
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Draper logró el quiebre en el cuarto juego, con el saque de su lado, pero su rival impidió que ampliara la ventaja y devolvió la rotura. El set recuperó el equilibrio y fue hasta el 'tie break', que dio aire al octavo favorito del torneo.
En la manga definitiva, Draper no mostró fisuras, mientras que el checo dio síntomas de flaqueza. La igualdad acabó en el séptimo juego y consolidó Draper, que cerró la victoria al resto, por 6-3.
Jack Draper se enfrentará en la final con el ruso Andrey Rublev, que regresó cinco años después a la final del torneo de Doha tras ganar el pulso con el canadiense Felix Auger aliassime, que mantuvo el tipo hasta el final pero sucumbió después de tres sets (7-5, 4-6 y 7-6(5)), en dos horas y 50 minutos de partido.
El quinto favorito estará en su tercera final en el torneo. Ganó la edición de 2020 al vencer al francés Corentin Moutet y antes, en 2018, perdió contra el también galo Gael Monfils.
El canadiense, el único jugador del circuito que ha disputado más de una final ATP en lo que va de 2025 y que le han reportado los éxitos de Adelaida y Montpellier, no sacó rendimiento al final de los veintiún saques directos que firmó en el choque.
El buen saque le sirvió para llevar al límite a Rublev, al que solo ha podido ganar en uno de los siete enfrentamientos que han protagonizado, el más reciente, en mayo pasado, en la Caja Mágica, en la final del Masters 1.000 de Madrid.