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La Copa Libertadores define este jueves al último clasificado a las semifinales. Olimpia, el tres veces campeón de América, y Fluminense, que busca la corona por primera vez, juegan la revancha de los cuartos de final en el estadio Defensores del Chaco. El choque es el sexto en el historial del certamen y el tercero en la ciudad de Asunción.
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De los dos encuentros anteriores en la capital paraguaya, en 2013 y 2022, la victoria siempre fue local y remontando un resultado, una heroica que debe repetir nuevamente el Franjeado con el propósito de avanzar de ronda y quedar a dos partidos de la Final Única, que será el sábado 4 de noviembre en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
Olimpia y el primer duelo con Fluminense en Asunción
En el primer antecedente, en la edición 2013, también en cuartos de final, los dirigidos por Ever Almeida habían igualado 0-0 en el São Januário, la casa del Vasco da Gama. Siete días después, un 29 de mayo, el Rey de Copas debió revertir un 1-0 tras el error de Julio Manzur, quien intentó un pase atrás para Martín Silva, pero dejó corto el balón para el gol de Rhayner.
La alegría de los brasileños duró desde los 9′ hasta los 34′, cuando Juan Manuel Salgueiro, de tiro libre, empató la serie. El uruguayo fue la gran figura ya que con un doblete, sobre los 40′ de la primera etapa, convirtió de penal el 2-1 que sentenció el resultado y el pase a las semifinales. En aquel entonces, el Franjeado fue finalista, perdiendo con el Atlético Mineiro de Ronaldinho.
El último duelo entre Olimpia y Fluminense en Paraguay
En el segundo y último enfrentamiento en Sajonia, con Julio César Cáceres al mando, Olimpia intentaba entrar a la fase de grupos y el último escollo, en la Fase 3, era el “Flu”. Como en la anterior y en la actual, el Decano comenzó el cruce de visitante: perdió 3-1 en el Olímpico Nilton Santos del Botafogo. Pero gracias al tanto de Derlis González, el equipo regresó con vida.
Así como ahora, necesitaba dos goles para ir a los penales y aunque sufrió, logró en la agonía del cotejo. El 16 de marzo, Jorge Recalde abría la cuenta a los 36 minutos y sobre el final, a los 89′, Guillermo Paiva fue el salvador. Fueron a la tanda, en la que el Decano ganó 4-1 y accedió al cuadro principal, en el que quedó tercero y terminó disputando la Copa Sudamericana.