Sol de América presentó este martes una nota ante el Tribunal Disciplinario de la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF) para solicitar que el mediocampista Ignacio Miño, quien fuera expulsado durante el partido con Olimpia, no fuera suspendido.
Desde el club de Villa Elisa alegaban que el jugador no había golpeado intencionalmente al olimpista Miguel Amado en la jugada que le costó ver la tarjeta roja directa y que el golpe entre ambos fue producto de un choque casual.
Los solenses esperaban correr con la misma suerte que el joven jugador del Olimpia Ángel Martínez que había sido expulsado en un partido ante Sportivo Luqueño pero que luego fue absuelto de sanciones.
Sin embargo, la decisión del Tribunal no fue la esperada. El organismo no dio lugar al reclamo presentado por el equipo Danzarín.
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Según se puede leer en la resolución, la decisión se debió a que “efectivamente existio el contacto fisico del jugador Miño con el jugador adversario Miguel Amado del club Olimpia, y la expulsion constituye el arbitrio del criterio del arbitro”.
El Tribunal alega que su criterio es intervenir o dejar sin efectos o reducir sanciones solo en casos de graves errores manifiestos.
Exponiendo esto, se decidió suspender por dos partidos al mediocampista solense.