"No me jugaba nada porque tenía a los rivales inmediatos muy alejados en la general y salí a disfrutar la contrarreloj y sufrir poco, así que conseguí los objetivos y estoy contento con el resultado final", señaló Valverde en la meta de Verona.
Después de un Giro de gran exigencia física, en el que se ha rodado a alta velocidad en cada etapa, Valverde piensa en el descanso y acabar su última temporada de la manera prevista.
"En este Giro se ha volado, hemos ido muy deprisa y eso se ha notado en esta tercera semana de carrera. Ahora toca descansar, estar con la familia y seguir con la temporada. Tengo previsto la Clásica de San Sebastián, La Vuelta y finalizar, como siempre, en Il Lombardía", concluyó.
