Doce selecciones por categoría han competido en las World Rugby Sevens Challenger Series celebradas los dos últimos fines de semana en el estadio Markötter de Stellenbosch (Sudáfrica), que han concluido este domingo con la victoria de las anfitrionas en féminas y del combinado masculino de Tonga.
Las sudafricanas, que han ganado los dos torneos -ambos contra Bélgica con tanteos ajustados en las finales-, integrarán la próxima temporada las Series Mundiales en sustitución de la selección que descienda de forma directa, con toda probabilidad Brasil, tras la última etapa, que se celebrará entre el 12 y el 14 de mayo en Toulouse (Francia).
Las Series Mundiales masculinas reducen para la edición 23/24 de quince a once el número de integrantes fijos, por lo que en esta campaña habrá un descenso directo -Japón ha perdido virtualmente la categoría- y Tonga, ganadora en Stellenbosch merced a un primer puesto y un segundo, deberá disputar un torneo de promoción el 20 y 21 de mayo en Londres.
En la capital inglesa, los tonganos se mediarán con las selecciones que, tras el torneo de Toulouse, estén clasificadas entre la duodécima y la decimoquinta plaza: Canadá y Kenia con toda seguridad, más la peor clasificada entre Uruguay y España, a las que sólo separa un punto antes de la disputa de la etapa francesa.
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El formato de dicha promoción, en la que sólo el ganador jugará la próxima edición de las Series Mundiales, es una liguilla de los cuatro equipos todos contra todos cuyos dos primeros clasificados disputarán la final.