“Es fundamental que conozcamos el repertorio que fue escrito y pensado específicamente para piano”, dijo Chiara D’Odorico en entrevista con ABC Color, sobre la razón principal de la selección de temas que conforman su disco.
Según la artista “se conocen obras que son transcripciones para piano o folclóricas, pero no académicas”, ya que “lastimosamente la música para piano no ha tenido la suerte de ser difundida masivamente como la música para guitarra como ocurrió con Agustín Barrios “Mangoré”. D’Odorico insistió así en la importancia de “trabajar en este aspecto, porque hay excelentes compositores que el mundo debe conocer”.
En tal sentido, Chiara incluyó música “desde lo tradicional hasta lo contemporáneo”, pues su idea es “mostrar lo que nos dejaron compositores del siglo XX (como Moreno González, Lara Bareiro, Lobito Martínez) y también compositores que están en actividad hoy en día”. Para D’Odorico es necesario dejar registro de “lo que nos dejaron esos grandes músicos como también la difusión de lo que se está haciendo hoy”.
El disco incluye obras de Jorge “Lobito” Martínez, Juan Carlos Moreno González, Carlos Lara Bareiro, Diego Sánchez Haase y Nancy Luzko.
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Esta vez Chiara interpreta piezas de otros compositores, pero busca también volcar su parte personal en cada obra. Por eso, para ella, “la idea de interpretar una pieza musical siempre se trata de descubrir todo lo que el compositor quiso expresar en esos pentagramas a través de las notas”. Entonces, “siendo que cada obra es un mundo distinto, uno tiene que comprometerse con esa obra, analizarla, comprenderla, hacerla propia y volcar todo nuestro sentimiento para poder dar “vida” a cada nota musical”, reflexionó.
Al respecto de componer temas propios evaluó que no es algo que busque ahora mismo. “Siento que estoy muy dedicada a la “interpretación”, esto es lo que me llena y me da muchísimo placer. En nuestro ambiente, el de la música académica, son dos ramas muy distintas la de la interpretación y la de composición”, agregó.
Intenso proceso
Muchos meses de trabajo conllevó la realización de este disco, desde la preparación previa con las obras. Con cada música “uno se tiene que preparar al 200% antes de ir a un estudio de grabación”, contó la pianista. “Luego llega el día de grabar propiamente dicho, son días muy intensos, de adrenalina, nerviosismo, ansiedad, disfrute, placer y mucha concentración… es una mezcla de sensaciones que uno siente, es algo muy distinto que no se puede comparar con un concierto o concurso, es algo único. Y más cuando se trata de un proyecto y un sueño tan ansiado que tenés”, subrayó.
Luego llega el proceso de posproducción, que “también es largo”, indicó, pues se hace la “selección, edición, mezcla, masterización, producción de fotos y diseño”.
El valor de la música
“Lo más importante y lindo” para Chiara es que ahora el disco ya puede llegar a oídos de todos. “Todo este trabajo no tiene sentido si no se escucha, si no se comparte”, añadió.
Recordó que en la semana de lanzamiento, la que calificó de “una locura”, recibió muchos mensajes de personas contándole que escucharon el disco y le dieron devoluciones de las obras y compositores que han conocido.
“He recibido un montón de mensajes y realmente fue hermoso, estoy muy agradecida a cada persona que me regala unos minutos de su tiempo para escuchar este álbum. Esto me llena el corazón y digo que el trabajo se está logrando. El disco nació el lunes 20 de mayo con el lanzamiento y espero que llegue a la mayor cantidad de personas y que conozcan estas obras maravillosas”, manifestó.
Chiara D’Odorico tiene planeado recorrer con una gira de conciertos para compartir estas obras. “Seguramente después me pondré a trabajar arduamente en otro proyecto musical de gran envergadura”, indicó.
Prometedor futuro
Acerca de la actualidad pianística en nuestro país, D’Odorico observó que “en general, en Paraguay, en los últimos años empezó a crecer mucho el ambiente musical; de alguna manera, a profesionalizarse”.
En ese aspecto, afirmó que “hay una camada de pianistas jóvenes que se ha ido conformando a lo largo de la última década. Algunos estudian y viven en el exterior y otros están en el país. Creo que de aquí a unos pocos años va a haber más movimiento en cuanto a grabaciones, conciertos y a la formación de pianistas en general”, auguró.
Chiara reafirmó así que lo necesario para un artista es “la responsabilidad, la disciplina y el trabajo duro”. “Todo esto debe estar acompañado de placer y amor por lo que uno hace y tener los objetivos claros”, concluyó la concertista.