El titular de FAP considera inaceptable el manejo de algunos clubes que arrastran deudas con sus empleados, recibiendo un monto considerable que con un buen manejo puede alcanzar para sobrellevar la temporada.
Por dar un paso adelante. “Esta no es una guerra de los jugadores contra los dirigentes. Es una lucha para mejorar el escenario jurídico y profesional de nuestro fútbol”.
Los atrasos. “Los abusos y los maltratos que reciben los futbolistas por reclamar sus salarios caídos ya son inaceptables, porque eso es un ataque directo a la mejor calidad y fortaleza del jugador paraguayo, que es su carácter”.
Nobleza del deportista. “Si seguimos hiriendo el tremendo corazón del futbolista paraguayo, dentro de poco vamos a tener un jugador sin mística y sin carácter para rebelarse a las exigencias y presiones de la competencia de alto nivel internacional”.
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A imponer una mentalidad ganadora. “Lo peor en un equipo es tener jugadores con una mentalidad de equipo chico o un sentimiento de club social”.
Aportes externos. “Agradecemos el aporte que recibimos de la Conmebol a través de la APF. Fue un gran balón de oxígeno para muchos, pero no queremos que eso se haga norma, porque lo normal es que recibamos del club en el que trabajamos, nuestro salario en tiempo y en forma, y eso tiene que ser controlado por la APF, como lo hacen todas las asociaciones”.
Aplicación de castigo para los que estén en falta. “En cualquier asociación con fútbol profesional, un club que no cumple con su responsabilidad salarial con sus jugadores el primer mes, ya es castigado, por ejemplo con quita de puntos, como pedimos en nuestra nota y hasta con perdida de categoría”.
Riguroso control. “La industria del fútbol y los futbolistas generan suficientes recursos como para que un club cumpla en tiempo y forma con el pago de lo más sagrado para un trabajador, que es su salario y eso lo tiene que controlar la APF”.
Malos manejos. “No puede ser que un club como General Díaz haya retirado más de 1.100.000 dólares, por los derechos de televisación por el 2020 y que no haya pagado un solo salario a los jugadores en este año, que sumando todo el plantel de jugadores no llega a 250.000.000 de guaraníes por mes. Más o menos según las variables del cambio son US$ 1.100.000 a G. 6.500 llegamos a G. 7.300.000.000. Teniendo en cuenta 250.000.000 guaraníes por 10 meses dan 2.500.000.000. La plata que generan el fútbol y los futbolistas tiene que quedar en el fútbol y no ser desviada para otro fin. Los salarios impagos ya son muy groseros, por lo que ya son inaceptables”.
Problemas en Luque. “Los jugadores de General Díaz y Luqueño que hace tiempo viven una situación dramática y empujados por la necesidad nuevamente fueron presionados a aceptar menos de un tercio de sus salarios por trabajos impagos. Una puñalada infame al espíritu del ser futbolista”.
El ascenso. “La División Intermedia, que por ley es una categoría profesional, está pasando también una situación dramática, sin salarios, a excepción de un par de clubes (Sportivo Trinidense y Guaraní de Trinidad, Itapúa) y con la incertidumbre de jugar o no el torneo y con centenares de familias que dependen exclusivamente de ella para su sustento”.
Respaldo de los socios. “Gracias a Dios tenemos una generación de futbolistas que jugaron en el gran nivel internacional y que son conscientes de lo que se vive en el fútbol profesional. La camada que incluye a los muchachos de Sudáfrica 2010, los más exitosos a nivel de la selección, tienen la magnifica oportunidad y también la responsabilidad de jugar el partido mas importante a favor de la verdadera profesionalización de nuestro fútbol. Los Roque Santa Cruz, Nelson Haedo, Paulo Da Silva, Cristian Riveros, Víctor Cáceres, Jonathan Santana, Antolín Alcaraz, Óscar Cardozo y todos los grandes de la Copa del Mundo 2010 tienen esa histórica misión”.
Planes de crecimiento. “En ese aspecto ya tenemos coordinado con varios de ellos un gran proyecto para La Casa del Futbolista Paraguayo, que contempla un centro médico de diagnóstico y rehabilitación; un centro educativo con orientación deportiva para futbolistas jóvenes; un centro de capacitación para futbolistas activos y retirados y un centro de asistencia y actividades sociales. Lo bueno es que para este proyecto ya contamos con los recursos”.