/arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/5QRHMEJ4FBFEFMGZU3SPBK2J2U.jpg)
Cargando...
Desde Bolivia se informó que no hay orden de captura internacional contra los imputados Celia Castedo Monasterio, exfuncionaria de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (Aasana) de aquel país, y de Marco Antonio Rocha Venegas, director de operaciones de la aerolínea Lamia.
“Estamos a la espera de que la autoridad jurisdiccional fije fecha y hora de la audiencia y disponga la notificación por edicto de los imputados. Mientras no se realice la audiencia y no se los declare en rebeldía, el Ministerio Público no puede tramitar la orden de captura internacional”, explicó la directora nacional anticorrupción de la Fiscalía General del Estado, Fanny Alfaro.
Sin embargo, se aclaró que existe ya una imputación contra Marco Antonio Rocha Venegas por la presunta comisión de los delitos de desastres en medios de transporte; homicidio culposo y lesiones gravísimas, delitos que también pesan contra Celia Castedo, quien además fue imputada por incumplimiento de deberes y uso indebido de influencias en el desempeño de su labor.
Pasó por Paraguay
Documentos de Migraciones del Paraguay confirman que Rocha Venegas ingresó a nuestro país el lunes 21 de noviembre a bordo del vuelo Z8403 de Amaszonas, procedente del aeropuerto Viru Viru de Santa Cruz de la Sierra.
Rocha, exmilitar, piloto y accionista de Lamia, salió del Paraguay el 23 de noviembre –cinco días antes del fatídico accidente del avión de su compañía en Colombia– a bordo de una aeronave de Amaszonas con destino a Santa Cruz de la Sierra.
Paraguay es el último paradero conocido del empresario, ya que el Gobierno boliviano ha negado que el hombre hubiera vuelto a entrar a ese país.
Rocha Venegas está siendo buscado por el accidente aéreo que el 28 de noviembre último ocurrió en las proximidades del aeropuerto de Medellín, hacia donde se dirigían futbolistas de Chapecoense para disputar el partido de ida de la Copa Sudamericana. La tragedia causó la muerte de 71 de los 76 ocupantes de la aeronave, la mayoría jugadores del Chapecoense y una veintena de periodistas brasileños.