Seguro que luego se hablará de la extracción fuera de contexto de sus manifestaciones, pero no caben dudas que en ocasiones la excesiva autoestima conduce a Ramón a declarar lo que no debe.
Mañana le dará la mano a un prestigioso Gerardo Martino, que pasó por la Albirroja, como también lo hicieron los muy y honrosamente prestigiosos Aurelio González, Benjamín Fleitas Solich y Cayetano Ré, por citar solo algunos de los nacionales. ¿Cuál fue el más prestigioso de todos? Ramón Díaz debería inhibirse como juez.