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Pese a la mejora en la proyección, está por encima del tope establecido en la Ley de Responsabilidad Fiscal que es del -1,5% del producto interno bruto (PIB). Recién para el 2017 esperan que el déficit converja con la meta fiscal del Gobierno.
Según el análisis de la consultora brasileña, la contención de los gastos primarios corrientes permitió el aumento de la inversión pública sin deteriorar el resultado fiscal.
El reporte de Itaú Macro indica que el gasto primario corriente aumentó 1,7% anual, incluyendo una variación nula para los salarios, mientras que el gasto de capital creció 32%. En tanto que los ingresos tributarios subieron 6,5% anual y las transferencias de regalías recibidas de Itaipú lo hicieron 9,7% anual.
El superávit comercial en los primeros nueve meses del año triplicó el resultado en igual periodo de 2015, ayudado por un menor precio de los combustibles. Con base en últimos datos del comercio exterior, la consultora brasileña decidió ajustar al alza nuestra la proyección de superávit de este 2016 a 1.500 millones de dólares desde 700 millones estimados anteriormente. Para 2017, esperan un superávit menor (cercano a 1.000 millones) debido a un aumento en el valor de las importaciones.
Crecimiento firme
En cuanto a la previsión del desempeño económico, aseguran que el crecimiento sigue firme, por lo que mantienen su proyección del 4% para este año, que se ubica por encima de la proyección oficial del Gobierno (3,5%) y el último relevamiento de mercado (3,5%). Para 2017, igualmente esperan un crecimiento de 4%, sostenido por un escenario de recuperación esperada de Brasil y Argentina. En lo que respecta a la inflación, esperan que se ubique en un rango cercano al 4% en 2016 y de 4,5% en 2017.