Baja de la actividad comercial elevó el nivel de pobreza en las fronteras

La baja de la actividad comercial en Ciudad del Este, Hernandarias y otras ciudades fronterizas impactó en la condición de vida de muchos pobladores que dependen de las ventas para su sustento, sostuvo ayer, al analizar la pobreza, el economista y exministro de Hacienda Manuel Ferreira.

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El economista explicó que la actividad comercial se redujo de manera considerable en las ciudades que lindan con el Brasil en los últimos años, lo que pudo tener su efecto en el incremento de la pobreza en estas zonas. Según detalló, esto se debe a que el país vecino acumuló dos años de recesión económica, sumada a la crisis política que influyó en el nivel de consumo de sus pobladores que se mostraron más cautos en sus compras en Ciudad del Este y Hernandarias, principalmente.

La pobreza en Alto Paraná se incrementó 20% en el 2016, es decir que unas 35.933 personas pasaron a engrosar la franja de pobres en el último año en dicha localidad, totalizando unas 211.544 personas, según los datos de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos.

Por otra parte, también varias localidades en Itapúa también sufrieron pérdidas en el sector comercial, además de las dificultades en la actividad agrícola por las inundaciones y bajas de precios, según explicó el exministro de Hacienda.

Agregó además que la reducción del contrabando desde el lado argentino a nuestro país también tuvo su efecto en los sectores más vulnerables que dependían de dichas ventas en varios puntos del territorio.

La pobreza total en Itapúa aumentó 21% en el 2016, agregando a 32.364 personas a la franja, con lo cual totalizaron 185.613 personas en situación de pobreza e indigencia.

Sobreendeudados

Otro factor a considerar en el incremento de la pobreza es el sobreendeudamiento de las personas, lo que se vino incrementando considerablemente en los últimos años. El economista explicó que al reducirse los ingresos en los sectores vulnerables, también impactó en los compromisos que estas personas tenían en los bancos, financieras, cooperativas u otras entidades de crédito. Las personas sufrieron la reducción de sus ingresos, y al estar sobreendeudados quedaron con poco margen para su sustento. Esta situación, según Ferreira se vio tanto en la actividad comercial como en el rubro agrícola. En este último segmento, alrededor de 20.000 microproductores que sufrieron los impactos por la baja de precios de las materias primas y las condiciones climáticas, también se encontraban sobreendeudados, condición que repercutió para que los mismos reduzcan su condición y calidad de vida.

Misiones, otro muy afectado

El departamento de Misiones fue uno de los más golpeados en los últimos años por las inundaciones y bajas de precios de los commodities. En esta zona, cuya actividad principal está en el sector agropecuario, la pobreza total se incrementó 22% en el último año, según los recientes datos proporcionados por la Dirección de Estadística y Censos.

Unas 10.000 personas se dedican a cultivos de autoconsumo como mandioca, maíz y poroto en la localidad de Misiones.

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