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Para obtener el clínker, principal insumo para producir cemento, debe calcinarse la piedra caliza en un horno. Este proceso se denomina clinkerización. El horno funciona con combustible, que es el fueloíl, y que tiene un costo muy elevado para la INC.
Atendiendo esta situación, hace años está pendiente en la cementera un proyecto para cambiar justamente el sistema de combustión de este horno y hacer que empiece a funcionar a partir del coque, un carbón mineral que tiene un costo mucho más bajo que el fueloíl. Pero este cambio de sistema requiere de una transformación de los equipos de la INC, con el objetivo de que se adapten al nuevo sistema de combustión.
Oferta mexicana
El actual titular de la estatal explicó ayer que técnicos de la Cementera mexicana Cemex –una de
las más grandes fábricas de este rubro en el mundo– estuvieron en nuestro país justamente para hacer un estudio sobre la factibilidad de que se pueda llevar adelante este cambio de sistema de combustión en la INC.
Krussel añadió que en una primera visita, los técnicos mexicanos hicieron estudios preliminares y enviaron los resultados a México. Luego, otro grupo, con los principales directivos de la cementera mexicana, llegó al país para reunirse con autoridades del Gobierno y de la INC en la busca de un acuerdo.
Krussel explicó que la mayoría de las plantas cementeras de Cemex cuentan con la combustión a base de carbón mineral, por lo que sus técnicos saben realizar la transformación que requiere la INC.
El funcionario dijo que la reunión fue positiva, pero que todo está todavía en estudio. En ese aspecto, comentó que ahora se espera una segunda visita de los técnicos de Cemex, que volverán hacer un relevamiento de datos e informes, pero esta vez, de una manera mucho más pormenorizada, agregó.
Se espera que después de este segundo informe, los directivos de la empresa mexicana hagan su propuesta e indiquen el monto de inversión que se requerirá para hacer la transformación del sistema de combustión.
De acuerdo con lo expuesto por Krussel, un estudio que realizaron con gerentes y técnicos de la INC revela que de utilizar la cementera estatal el sistema de combustión a carbón mineral, se estaría ahorrando unos 25 millones de dólares al año. Este dinero puede reinvertirse en la cementera, lo que generaría una mayor producción de cemento en un tiempo determinado, finalizó el ejecutivo.