Intendente de San Cristóbal no tiene cómo explicar venta de inmuebles

Ildefonso Santander, intendente de San Cristóbal, vendió inmuebles con títulos de propiedad nulos. Ahora sus clientes reclaman su intervención en la colonia María Auxiliadora. Hoy vence el plazo otorgado para iniciar la cosecha de los granos.

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Ildefonso Santander, intendente municipal de San Cristóbal, ganó cierta notoriedad al cortar su camisa con un cortaplumas en plena concentración campesina.

El delirante acto tuvo lugar en la protesta del domingo pasado, en la colonia María Auxiliadora, oportunidad en que dijo que “correrá sangre en este lugar”.

La colonia se encuentra ubicada en el distrito de Avaí, departamento de Caazapá; en el lugar rige una medida cautelar que prohíbe realizar actividades productivas.

Los campesinos paraguayos se concentraron en el lugar para reclamar un permiso de cosecha en favor de productores brasileños que alquilan sus tierras.

Uno de los afectados por el mandato del juez Luis Fernández Venialgo es el productor Adenir Luiz Canei, imputado por el supuesto delito de desacato.

De acuerdo a las escrituras, el 16 de diciembre de 2003, el intendente Ildefonso Santander vendió tierras del Instituto de Bienestar Rural al productor Canei.

En el documento de transferencia, realizado por la escribana Olga Guerrero Barros, consta que Ildefonso obtuvo el título de 12 hectáreas el 25 de julio de 1995, es decir vendió fuera del plazo establecido por la ley que es de 10 años a los sujetos de la reforma agraria.

Venta a terceros

Canei no es el único comprador de tierras del IBR (actual Indert). Entre otros se puede mencionar a las siguientes personas: Luiz Zocche, Enrique Zocche, Marli Aparecida Zocche, Antonio Machado Zocche y Joilce Zocche Menegon.

Las personas nombradas son parientes cercanos a Romualdo Zocche, gerente general de la Cooperativa Pindó, con sede en la ciudad de San Cristóbal, Alto Paraná.

Los títulos sobre las cuatro mil hectáreas de la colonia María Auxiliadora son nulos; los documentos fueron expedidos por funcionarios del entonces IBR sin que el instituto agrario tenga propiedad sobre la tierra.

El inmueble donde está asentada la colonia es propiedad de la firma Cardenales SA. La firma solicitó la medida cautelar en agosto de 2017 y de aquel entonces a hoy los productores brasileños trabajaron en la siembra en abierta violación al mandato judicial.

Ahora llega el período de cosecha y recuerdan el derecho a trabajar; desde agosto de 2017 se limitaron a dejar pasar el tiempo.

Adenir Luiz Canei reclama apoyo para cosechar su grano y los campesinos paraguayos son enviados al frente. La Cooperativa Pindó es receptora de la soja cultivada en forma ilegal.

roque@abc.com.py

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