Esta reducción está en línea con la disminución que se viene registrando en los préstamos de varias ramas, especialmente en las líneas de desarrollo y para las viviendas, y también en respuesta a la oferta crediticia que se observa últimamente en la mayoría de las intermediarias sobre las líneas de consumo que se vienen reactivando por el efecto de fin de año, con algunas promociones.
Según los datos, el porcentaje extremo para que las tasas no sean consideradas usurarias se calcula con la información de las intermediarias, y para ello utilizan un promedio móvil de las operaciones de crédito de consumo de los últimos 24 meses.