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Añadió que el hecho de que los argentinos vengan a comprar aquí puede ayudar a minimizar o paliar la caída en el consumo y en las ventas que venimos sintiendo desde hace meses. “Pero también, si eso no se controla de alguna forma, estas ‘ventas especiales’ pueden causar desabastecimiento o escasez en algunas o muchas categorías y el encarecimiento de productos, propiciando inflación, por un lado, y el oportunismo avivado de quienes siempre están especulando para cualquiera de los lados”, alegó.
Biedermann resaltó que la nueva situación Argentina, donde muchos insumos y productos están subiendo de precio es lo que hace que muchos argentinos estén llegando a Paraguay, especialmente a ciudades fronterizas, a llenar los tanques de combustibles, comprar productos que están a mejor precio de este lado, especialmente mercaderías de consumo familiar o personal.
En ese sentido, el Gobierno celebra la suerte de reactivación comercial en la frontera con la Argentina, favorable para Paraguay, y –sobre todo– que ya no haya mercaderías argentinas de contrabando en las calles y mercados de nuestro país, según expresiones del ministro de Industria y Comercio, Gustavo Leite. “Si es cierto lo que dicen, las industrias paraguayas van a producir más y llegar a más escalas. Eso en teoría debe abaratar costos de producción. Los comercios, hoteles y gasolineras de Encarnación están muy contentos hoy”, dijo Leite hace unos días.