Una de estas nubes fue divisada días atrás en las comunidades de Campo Loa del distrito de Mariscal Estigarribia dirigiéndose hacia el norte. Semanas atrás hubo mangas de langostas en el sureste del Chaco Central, así como en zonas del río Pilcomayo y el Alto Chaco.
Los ganaderos reconocieron la presencia de los insectos, pero expresaron que aún no se reportan daños.
Aparentemente no son del género de la langosta voladora Schistocerca cancellata, que puede alcanzar un tamaño de hasta 9,5 centímetros. Este tipo de insecto es más agresivo y apareció en el año 2017, primero en Alto Paraguay y luego en el Chaco Central, causando daños a cultivos, en algunos casos muy graves.
La plaga se combatió con una intensa campaña de concienciación del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave) entre los productores y cooperativas del Chaco Central para la aplicaciones terrestres y fumigaciones áreas rápidas para acortar el ciclo de vida de los insectos.
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En junio de este año el Senave resolvió declarar emergencia fitosanitaria de 60 días para Boquerón y Alto Paraguay para contener el avance de la plaga, evitar que se disemine a otras áreas y reducir un eventual impacto sobre cultivos.