Los feriantes proceden principalmente de las compañías Tañarandy y San Gabriel.
La presidenta de la Comisión de Feriantes de San Ignacio es Mirian Aceval. Mencionó que entre los productos que venden se encuentran lechuga, repollo, tomate, locote, zanahoria, cebollita de verdeo y frutas de estación, además maíz, mandioca, batata, habilla, poroto, zapallo, calabaza y otros. Así también, carne de gallina, pato y cerdo, todos caseros. Además, leche, queso y huevos.
Aceval indicó que ella se dedica a la producción hortícola y granjera desde hace 27 años y mencionó que la feria funciona al costado del templo desde hace 15 años en forma ininterrumpida.
Tuvieron que suspender la feria por unos 20 días, incluyendo la Semana Santa, atendiendo la cuarentena sanitaria y por miedo al contagio del covid-19, explicó.
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“No hemos recibido ninguna ayuda del Gobierno, vivimos de nuestro trabajo y por eso tuvimos que volver a la feria”, aclaró Aceval.
Mencionó que la ganancia semanal de cada feriante es de entre G. 700.000 a G. 800.000 en promedio, libre de los gastos por traslado, desayuno y almuerzo.