Los técnicos observaron el lugar y recolectaron muestras del tajamar con pigmento de material rojo. También extrajeron agua de otro reservario aledaño, en condición normal.
Registraron la temperatura del agua, el valor del ph o conductividad eléctrica, nivel de oxígeno disuelto y sólidos.
La microbiología de las muestras tomadas será analizada en forma preliminar dentro de 10 días, según indicó Sara Riquelme, de la Dirección de Vida Silvestre del Mades. Agregó que a simple vista se podría decir que se trata de un fenómeno natural, que podría estar relacionado con la sequía, ya que no se observa un olor característico de algún tipo de contaminación.
No existe planta industrial en la zona, solo granjas, pero llamativamente otras aguadas de la zona no presentan el mismo fenómeno, dijo.
El tajamar ya se convirtió en un atractivo, adonde acuden constantemente personas para grabar videos, sacar fotos y selfies.
Un equipo técnico del Centro Multidisciplinario de Investigaciones Tecnológicas (Cemit) también acudió al lugar el domingo último y extrajo muestras para analizarlas.