Los barrereños piden más apoyo durante el “desfile de la República”

Pobladores de Eusebio Ayala recordaron ayer tres acontecimientos que marcaron su historia: 246 años de su fundación de la ciudad, 147 años de la cruenta Batalla de Acosta Ñu, y el día de San Roque, protector espiritual de la comunidad cordillerana.

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EUSEBIO AYALA, Dpto. de Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). El denominado Desfile de la República se realizó ayer con la participación de más de 100 instituciones educativas provenientes de diferentes puntos del país. Miles de estudiantes marcharon en homenaje a los Niños Mártires de Acosta Ñu; también se adhirieron a los festejos fundaciones y patronales de la ex Barrero Grande.

El vicepresidente de la República, Juan Afara, el gobernador de Cordillera, Carlos María López (PLRA), y el intendente Eladio Giret (ANR) asistieron a la actividad.

En su discurso, Giret, manifestó que la ciudad de Eusebio Ayala tiene el compromiso de cuidar el legado histórico, además de mantener viva la memoria de las hazañas de los héroes que regaron con su sangre esta tierra. Añadió que para ello necesitan mayor apoyo de las autoridades del Gobierno central.

Miles de niños y jóvenes coparon la ciudad, desplegando toda su gallardía y creatividad durante el desfile. Estamentos militares y policiales, como el Liceo Militar Acosta Ñu, la Dirección de Material Bélico de las Fuerzas Armadas de la Nación y el Colegio de Policía, también rindieron honor a los niños caídos durante la Batalla de Acosta Ñu el 16 de agosto de 1869.

El jefe comunal dijo después que entre las necesidades prioritarias del distrito se encuentra la culminación del empedrado del tramo de 18,6 kilómetros que conduce al cerro La Gloria. La vía está en lamentables condiciones y la obra emprendida por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) fue abandonada hace más de cuatro años.

Precisamente, hoy se cumplen cinco años del inicio de la obra, que debió terminar en 24 meses. Los trabajos fueron presupuestados en G. 13.139 millones y adjudicados al consorcio Tembiapo Porã (integrado por el Ing. Pedro Duarte, Ing. Óscar Bieber Benítez y el Arq. Daniel Gil), firma que llegó a cobrar el 45% de lo estipulado.

El contrato fue cancelado en 2011 y en noviembre de 2012 el MOPC realizó un nuevo llamado a licitación y adjudicó la obra a la empresa que presentó la oferta más alta, superando incluso el precio referencial.

Luego de publicaciones periodísticas, el proceso fue anulado y la obra quedó estancada. Según el intendente, no tienen información de que el MOPC haya llamado a una nueva licitación.

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