/arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/ZRYVWNMBZ5AFFJGXEBUOH4QAEM.jpg)
Cargando...
MBOCAYATY DEL YHAGUY, Dpto. de Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). El hecho se registró el sábado 31 de diciembre en horas de la tarde ante la inacción de efectivos de la Policía Nacional. Los hermanos y políticos del PLRA Jacinto y Luis González repartieron golpes a los integrantes del grupo dirigido por el concejal liberal Francisco Guillén.
El edil Guillén y su cuñado Arnildo Denis resultaron con heridas.
La reacción desmedida del jefe comunal se debió a la colocación de pasacalles en sitios públicos de la comunidad, en los que exigen al jefe comunal que respete las ordenanzas de la junta municipal y el cese de la prepotencia e impunidad.
Guillén y Denis fueron trasladados al centro de salud local, donde se les informó que no había médicos de guardia. Ante este hecho se dirigieron al puesto de Salud de Santa Elena, distante unos 10 kilómetros.
Según denunciaron, cuando se dirigían a Santa Elena el exintendente Luis César González se atravesó en el camino. Guillén relató que llamó al Sistema 911; minutos más tarde agentes de la comisaría de Santa Elena a bordo de una patrullera llegaron al sitio y escoltaron al edil Denis hasta el centro de salud.
Se vive un ambiente de violencia e inseguridad institucional en la zona, por lo que se solicita una urgente intervención de las autoridades nacionales en el lugar, según manifestó Guillén. Agregó que incluso temen por su vida.
Hace varios meses hay un abierto enfrentamiento entre un grupo de concejales y el intendente. Los ediles críticos a la gestión del jefe comunal son María Ortega (ANR), Karina Paniagua (PLRA), Francisco Guillén (PLRA), Diego Marín (PLRA) y Brígido Amarilla (ANR).
El grupo de concejales solicitó a la Cámara de Diputados que intervenga la Municipalidad. Denunciaron que no presenta sus rendiciones de cuentas del uso de los recursos comunales, constantes ausencias del jefe comunal para viajes al exterior sin comunicar a la Junta, entre otros.
González ordenó el cambio de todas las cerraduras de la sede de la Junta Municipal para que nadie pueda ingresar al sitio. Fue después de un incidente que protagonizó el jueves cuando ingresó en la sesión de la Junta Municipal para exigir la reincorporación de dos concejales colorados que fueron reemplazados por sus suplentes por permanente inasistencia.
Los cinco concejales presentaron una denuncia por agresión y amenaza de muerte en la comisaría local y en la fiscalía de Eusebio Ayala. Aseguraron que ante la inacción temen por sus vidas.
El sábado y ayer intentamos comunicarnos con el intendente Jacinto González y su hermano Luis César, pero ninguno respondió nuestras reiteradas llamadas telefónicas.