La Cámara Federal de la capital argentina confirmó el procesamiento de Fernández por el presunto delito de peculado (malversación de activos públicos) mediante la utilización de aeronaves de la flora presidencial para su uso personal, trasladando sus muebles.
En otro caso, los jueces revocaron el procesamiento en relación al uso de los aviones para hacer llegar periódicos desde la capital del país hasta la sureña provincia de Santa Cruz, donde tiene una residencia particular.
El tribunal entendió que tanto los diarios como los informes de prensa era elementos vinculados a sus funciones como jefa de Estado.
La exmandataria está acusada de haber usado el avión Tango 01 en varias oportunidades para transportar desde el exterior muebles y otros objetos cuyo presunto destino final era alguno de los lujosos hoteles en El Calafate, propiedad de los Kirchner.
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Esta investigación es una derivación de la denominada “causa de los cuadernos”, y en la que prestaron declaración los pilotos de la flota presidencial.
Precisamente, la defensa de Cristina Fernández solicitó ayer a la Cámara Federal de Casación que revoque la orden de prisión preventiva dictada en septiembre de 2018 en contra de Fernández, que asumirá como vicepresidenta el próximo 10 de diciembre.
La orden de prisión nunca se hizo efectiva por los fueros parlamentarios de Fernández como senadora.
Hasta ahora, la bancada política de Cristina le ha salvado de quitarle los fueros para que enfrente la Justicia.