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La institución realizará las intervenciones de los locales clandestinos y luego denunciará los hechos a la fiscalía, para la persecución penal. “Durante la reunión pactamos que la Conajzar hará el proceso oficial, es decir, la intervención en que se compruebe la explotación clandestina, y realizará la denuncia. Luego, el Ministerio Público llevará a cabo los allanamientos correspondientes. El objetivo final es llegar a destruir estas máquinas”, sostuvo Balbuena.
Asimismo, explicó que iniciaron este proceso “para que la gente sepa que esto tiene una sanción penal de hasta 5 años de pena privativa de libertad”, por lo que comenzará la persecución a nivel jurídico.
El titular de la Comisión Nacional de Juegos de Azar indicó que los propietarios de los locales no solo deben habilitar sus salones comerciales de forma adecuada, con carteles que indiquen la “prohibición de acceso a menores”, sino tendrán que ceñirse a reglas de seguridad básicas. “Sin embargo, verán que en las calles y en cada esquina encontramos máquinas. Con esta situación estamos exponiendo a nuestros menores a la ludopatía”, expresó.
Balbuena concluyó que los juegos clandestinos son un mal que aqueja desde hace varios años. “Los principales juegos son la quiniela y los garitos clandestinos, con los que estamos teniendo problemas a los efectos del cumplimiento del canon total, que perjudica al erario público”, especificó.