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Giménez, bautizado en las redes sociales como “el hombre de la mochila” por la forma milagrosa en que sobrevivió al brutal choque protagonizado ayer por un ómnibus de la Línea 12 con otro de la Línea 20, manifestó que es oriundo de Villa Hayes y que se encontraba en Asunción realizando unas gestiones.
Añadió en una entrevista concedida anoche a ABC TV que milagrosamente solo sufrió algunos golpes al ser atropellado por el colectivo de la Línea 20, propiedad de la empresa Choferes del Chaco SA, luego de ser impactado por la otra unidad de transporte público.
Detalló que caminaba por la calle Humaitá desde la calle Colón, por lo que pudo ver el avance tanto de la línea 20 como de la línea 12, en la intersección con Nuestra Señora de la Asunción, respectivamente. Según el docente, la velocidad de ambos buses hizo que el impacto fuera inevitable.
“Veo esto y digo, estos van a chocar, entonces retrocedo tres pasos, trato de correr y la línea 20 me agarra, pero la mochila amortiguó el golpe. Me tiró contra la pared de un edificio y por poco no llega a pasar por encima mío”, expresó Giménez.
“Era la única persona que en ese momento estaba transitando por allí. Le dije a mis familiares que si en ese instante estábamos tres o cuatro personas más íbamos a quedar debajo del ómnibus, porque cuando es así, por el susto o tratando de salvar a alguien, mi reacción iba a ser mucho más lenta y la historia iba a ser seguramente diferente”, prosiguió.
“Había un árbol y un automóvil estacionado cerca y fue el árbol el que me salvó”, concluyó el docente.
Giménez informó también que a consecuencia del percance sufrió raspones, golpes y también algunas heridas cortantes producidas por los pedazos de vidrio del parabrisas. Fue trasladado al hospital del IPS, de donde se retiró tras recibir atención médica.
El brutal accidente se registró a las 11:20 de ayer. Perdieron la vida el chofer de la Línea 12, Diego Arturo Suárez Martínez, y la niña de 2 años Lady Belén Portillo Caballero, quien iba de pasajera con sus padres en el ómnibus de la Línea 20.
Por otra parte, un niño de 12 años que iba en el colectivo de la Línea 12, perteneciente a la empresa de transporte Magno SA, relató que era conocido del chofer malogrado y que momentos previos al grave accidente le dijo que fuera hacia la parte trasera para permitir el ingreso de otros pasajeros.