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La víctima fue Julio César Bogado Rivas (33), quien conducía una camioneta Volkswagen Amarok cuando fue sorprendido por dos sicarios que circulaban en una motocicleta en Jeres Ñu y Francisco Rodríguez. Sin mediar palabras dispararon a mansalva y mataron Bogado.
Media hora antes de que los sicarios ultimaran a Bogado, en la brasileña Ponta Porá se perpetró un homicidio con esas mismas características. Ahí la víctima fatal fue Charles Farías, brasileño y dueño de una tornería en esa zona.
Según los reportes, el infortunado fue sorprendido en el patio de su taller por un sicario que se dio a la fuga.
Hasta anoche los investigadores desconocían si ambos casos tienen alguna conexión entre sí, atendiendo a que los ataques sucedieron prácticamente de manera simultánea.